viernes, 2 de noviembre de 2012

5 de noviembre en Libertad 8

Tengo medio abandonado este blog, quizá me ocupe de demasiadas cosas y me olvide un poco de mí. El impulso de hacerlo fue por el comienzo de la grabación del nuevo disco, luego pensé que sería bueno contar aquí mis cosas, pero hace semanas que no entro por aquí. Por cierto, ¿hay alguien ahí? Seguro que sí, siento que se me escucha teclear. Vuelvo, pues, aquí para hablar de mi próximo concierto que será este lunes, de paso aprovecho para hacer balance de los dos últimos.

Ilustración de Andrea Mazas, hecha, creo, en 2005

En primer lugar voy a hablar un poco del concierto en el café Galdós del 28 de Septiembre. Como suele ser habitual, estuve obsesionado con este concierto mucho tiempo. Quizá un poco más que habitualmente. Volvía a tocar con Alberto Navales después un año sin subirnos juntos a un escenario, y aproveché para hacer un repertorio especial. Para empezar recuperé canciones de "Andrés Sudón vive" que hacía mucho que no tocaba, con la intención de despedirme de ellas, ya que en lo sucesivo tocaremos más las canciones del disco que estamos grabando. También añadimos nuevas canciones y nuevos arreglos de viejas canciones. Tanto el repertorio como el orden en el que lo interpretamos, fue minuciosamente pensado para crear una atmósfera concreta. Creo que lo logramos.  Bueno, lo logramos tanto que me rallé infinito;. al terminar el concierto, recogí mis cosas, apuré la copa y me largué a casa en un taxi mirando afectado por la ventanilla. Ese día llovió una lluvia amarilla y fea, fue el primero del otoño, un día como de muerte. Y la verdad es que ese día murieron canciones y formas que dejarán paso a lo que nazca.

Alberto Navales y yo el 28 de Septiembre de 2012 en el Café Galdós

No viene mal tener una dura crisis de vez en cuando, después de la horrible sensación que me dejó este concierto, pasé dos semana también obsesionado con el siguiente, que fue el 12 de Octubre en el Dog&Roll. Si en el del Galdós estuve acompañado por la guitarra de Alberto Navales, en este me acompañó el violonchelo de Óscar Martín. Fueron dos conciertos muy diferentes, tanto de repertorio como de actitud. Como era el día de hispanidad (fiesta en la que celebramos la construcción de un país a base de hostias, para lo cual sacamos a nuestro ejército a la calle), se me ocurrió celebrar el día de la naturalidad. Hay que evolucionar. Y esa fue la clave, la naturalidad. Para empezar tocamos desenchufados, lo cual provoca un rico silencio, a pesar de que la salita estaba repleta. Lo disfruté mucho, me resarcí de la desazón que me envolvió un par de semanas antes en el escenario del Galdós. Me vino tan bien este concierto, que al día siguiente me compré unos patines.

Óscar Martín y yo en el Dog&Roll el 12 de Octubre de 2012

Y ahora viene mi concierto de Noviembre en Madrid, este lunes, día 5 en el Libertad 8, el templo de la canción de autor. Esta vez estaré yo solo en el escenario. Físicamente solo, porque me acompañarán mis fantasmas, mis deseos, mis saudades, mis amores, mis dolores... Siempre vamos casi todos juntos a los conciertos, he convocado a todo lo que soy, espero no faltar. Aún tengo que retocar el repertorio, pero ya adelanto que voy a hacer un par de versiones que estos días estoy tocando mucho. La verdad es que mola que te guste una canción y poder tocarla y cantarla. Resalto esto, porque hacía mucho que no me estremecían las canciones que escuchaba, pero ahora que estoy grabando el disco, se ha disparado mi sensibilidad. a veces hasta tengo un leve impulso de expulsar una pequeña lágrima. Cuánto me gustaría llorar a cántaros. Espero no hacerlo en un escenario, aunque sienta las ganas. Os dejo aquí una canción que uso como declaración de intenciones, en ella invito a que se entre en mis ojos, a entrar en la canción y asumir la comandancia de mi re-evolución mental. Gracias a todos por estar ahí. Nos vemos el lunes.


viernes, 14 de septiembre de 2012

Concierto el viernes 28 en el Café Galdós de Madrid

Ayer fui a ensayar a casa de Alberto Navales para el concierto del viernes 28 de Septiembre en el Café Galdós. Creo que ya ha pasado un año desde que me acompañó Navales por última vez en concierto. Nada más llegar a Madrid empecé a hacer conciertos con él y con Josito Congosto a las percusiones. Quedaba de puta madre, pero como aún no tenía público suficiente para compensarles dignamente, decidimos esperar un poco para volver a tocar juntos. Ya no puedo esperar más, así que le he pedido que me acompañe en este concierto que haremos en plena grabación del nuevo disco.

Pues eso, que llegué a casa de Alberto Navales y Paula Lekuona, los dos amigos míos desde hace lustros, y Paula, que es cineasta, me enseñó su nueva tableta. Le pedí entonces que nos hiciera un vídeo promocional del concierto. Para hacer algo original, le propuse lo de siempre, "hagamos el vídeo desnudos". Ni cortos ni perezosos, Alberto y yo nos desprendimos de las prendas, nos desprendamos, y sin ensayo previo, grabamos este vídeo:




Cuando llegué a casa lo compartí, y he estado soñando toda la noche que era actor porno y que me daba mucha vergüenza. Eso me preocupa. Sale mi culo en el vídeo y me da palo. Es preocupante, porque nací desnudo, lo de la ropa lo he añadido después. Me preocupa porque así como no enseñamos nuestros culos, tampoco enseñamos nuestras almas. Me da vergüenza que me de vergüenza. Y lo que debería darme vergüenza es no haber estado nunca desnudo entre la naturaleza.


Esta ilustración (realizada por David de la mano) la usé para hacer una cartel de un concierto en Salamanca. Me sacaron cantares. Una persona, que luego se hizo muy amiga mía, le dijo a un conocido "no esperaba que Andrés Sudón hiciera esto". Tuve ocasión de hablar con ella y explicarle que es evidente que haciendo este cartel no pretendo atraer al público por la cualidades de mi físico, que sólo pretendo constatar que la música que hago está desnuda, que no intento decorar la realidad, que me muestro al natural, con lo bueno y lo malo de mí. Que en el escenario me desnudo, metafóricamente. Nuestros antepasados y nuestros tataranietos, se ríen de nuestra vergüenza ante la desnudez. Estamos viviendo una época mental todavía alejada de la realidad animal que somos. Seguimos en la edad media.

Para que el mundo evolucione (para que yo mismo evolucione) sólo puedo seguir siendo leal a mi mente abierta y universal cuando hago canciones, cuando hablo con los demás, cuando existo. Yo no ando buscando más que aportar algo, que mis canciones no sean lo que el público desea escuchar, que digan algo nuevo, algo que nos acerque a la tranquilidad existencial, a tener una consciencia de nosotros, de mí, más justa con la naturaleza. Vivimos presos de una mentalidad común estrecha y limitadísima, yo el primero.

Espero que este vídeo de promoción de mi concierto no cause trastorno a nadie, y si lo causa, que nos sirva para pensar un poco más allá. Lo he hecho porque deseo llamar la atención, quiero que mucha gente se acerque al Galdós a escucharnos. Como dije antes, hace mucho que no toco con Alberto Navales, y lo echaba de menos. En el ensayo no se notaba que llevábamos tanto sin tocar, Alberto recuerda todos los arreglos, y hemos incorporado cositas nuevas. Haremos canciones de lo nuevo que estamos haciendo y del disco "Andrés Sudón vive", que os dejo aquí para que escuchéis lo que hacemos en directo.

martes, 11 de septiembre de 2012

Septiembre

Por fin comienza el curso, siempre sufro el verano, todo se para y yo me siento flotar en medio de la nada. Pero al fin llega Septiembre, además de repente, casi sin esperarlo. Estos días he escrito un poema largo de los que me gusta a mí deyectar, pongo un extracto titulado Pero:


pero

comienza este otoño como un milagro
en medio de un verano deslumbrantemente negro,
echo de menos explotar, purgar mi necedad, ser sincero,

comienza este otoño con un silencio
en medio del violento parlamento de mi mente,
echo de menos sorprenderme, saber ignorar, estar tranquilo.

comienza este otoño como un correctivo
después de una pelea en el colegio,
tengo que ser menos cabestro, darme libertad universal, parecer natural (...)


Y comienza este otoño, este curso con mucho proyectos que me dan la vida en todos los sentidos. En primer lugar, y lo más importante, mi nuevo disco, que es como si fuera el primero. Aún no sé cómo lo voy a titular, pero sí las canciones que contiene. Quiero presentarlo el 21 de Diciembre en Madrid, aún no está confirmada la sala, pronto lo anunciaré. En este disco por fin voy a sonar como siempre he querido, aunque esté orgulloso de mis anteriores trabajos, este es para mí el primero profesional de verdad.

El productor del disco es Antonio de Pinto, cantautor a quien admiro y quiero mucho. Con él tengo otro proyecto. Nos vamos a ir de mini gira por algunas salas emblemáticas del país, ya tenemos varias fechas, pero las anunciaré todas seguidas cuando las tengamos. Eso sí, comenzaremos en Madrid y será en Noviembre. Y no van a ser conciertos de dos cantautores que se alternan en el escenario, vamos a prepararnos las canciones de los dos para tocarlas juntos, para hacer un espectáculo que mole, currado.

Otro proyecto del que estoy disfrutando es "Tres gatos en un tejado", todos los meses, el primer miércoles de cada mes, tocamos en Zanzíbar, somos Bruno Bonacorso, Gatoperro y yo. Juntamos nuestro repertorios y los tocamos juntos. Además, cada vez que actuamos tenemos un invitado especial del que hacemos varias canciones. Para mí está siendo muy enriquecedor y muy divertido. Somos tres personas con mucho en común que hemos seguido caminos musicales estéticamente diferentes, el resultado es caledoscópico. Nuestro próximo concierto es el día 3 de Octubre, y nuestra invitada es la joven Travis.

Y qué decir del proyecto que es el corazón de todo lo que hago, Micro Abierto Libertad 8. Comenzamos hace un año con él y nos está dando grandes alegrías. Es una alegría colectiva. Cada martes nos juntamos en Libertad 8, el templo de la canción de autor, y una media de veinte artistas cantan y recitan durante dos horas. Ahí he conocido grandes amistades, buenas influencias, y he podido desarrollarme junto a personas con mis mismas inquietudes. Este curso vamos a hacer muchas cosas, como talleres de creación, excursiones, micros abiertos monográficos, etcétera. El contexto perfecto para alguien que dedica su vida a las canciones, a las personas y al placer.

Todavía sigo llevando conciertos a Salamanca, en Octubre llevaré al Savor a Marwan, a Rafa Pons y a Fran Fernández, aunque ya me empiezo a alejar de mi ciudad de origen para centrarme en mi trabajo en la capital. Voy a comenzar a programar conciertos y actividades en un lugar nuevo llamado Dog&roll, un pequeño local sin amplificación, pero con una magia que permite hacer grandes cosas. Ya contaré las ideas que estamos desarrollando.

Así que muy bien, comienza el nuevo curso con todas estas cosas, además de mis concierto habituales. El primero será el 28 de Septiembre en el Café Galdós (Madrid), estaré acompañado del guitarrista Alberto Navales. Para Octubre haré un concierto con el violonchelista Óscar Martín, y ya en Diciembre presentaré el disco con toda la banda. Va a ser un gran curso, lástima que se termine el mundo justo el día que presento el disco, porque todo se está poniendo muy bien para mí, para mi alma voraz.

Os dejo un vídeo de la canción Gusto, un poema de Montse Villar, de su último poemario. Así me siento yo, "agua me nace en la boca / y no amargo limón de ausencia".

 

sábado, 18 de agosto de 2012

Puto poema (escrito en 2009)


Puto Poema

I

He olvidado el ocaso sin querer,
estaba despistado mirándome las pelotas.

Qué descuidado poeta,
qué onanista,
que hijo de puta.

II

Si tus ojitos fueran aceitunitas verdes
serías más rara que hostia,
me daría miedo hablar contigo.
Sin embargo eres lisa y casi castiza,
comprometedora, real y volatriz.

Que qué opino yo del amor:
lo mismo que los policías de la delincuencia.

Si no existiera el amor, sería civil,
apenas sería azul,
iría a clase todos los días,
me preocuparía por las cuestiones
y comprendería los argumentos.

III

Hay que ser ordenado,
pequeño imbécil,
tienes que coger tu cerebro,
trocearlo, pulir todas las aristas
y meterlo en equis cajas.

Hay que ser calzoncillista,
perro enano,
hay que disimular la simpleza del pene,
hay que eyacular a escondidas,
que no te vean los demás animales,
no sea que les entren ganas de tragárselo.

Hay que tal y que cual y su puta madre,
pero nadie te regala un minuto de sangre fresca
sin exigirte a cambio una cantidad-calidad de alma.

En resumen, somos todos unos hijos de puta.


IV

Un momento.

Me acuerdo de cuando era un pequeño adán,
qué vida tan simpática:
ésta no es Eva,
ésta tampoco, esta tampoco, esta tampoco,
tampoco ésta. Sigamos buscando;
éste no es Dios, ésta tampoco,
tampoco yo. Sigamos buscando pues.

Ahora soy un entregado platón
intentando explicar a los cristianos
en qué ha consistido el plagio.

V

Iríamos sólo a los sitios que nos gustan,
dudaríamos sólo de las convicciones propias…
Qué pena, por cierto, que haya muerto tanta gente interesante
en la guerra civil.

VI

Sólo me queda soñar que sudo sobre la playa,
que tengo domingos por la mañana en el estómago,
que una brisa de paella me despeina el pubis.

Camino con mis zapatillas blancas
por el paseo fluvial sembrado de caras,
muchas tetas geométricas, me han llenado de agua.

VII

Si no escribieras nada qué más daría,
leí en la lápida azul del aire,
yo también tengo muertos en las axilas
como aquellos que prometieron la democracia.
Algunas cosas bien y otras tan mal…,
Eco en el boulevard de la tranquilidad.

Estribillo y caca seca,
remos y arena,
perros y ganas,
gracias y hasta luego.


IX

¡Espere, señora,
se ha dejado aquí los chorizos,
las rosas y los espermatozoides!

Qué señoras son a veces las personas.
¡Señora, que se ha dejado usted aquí la idiotez!

Llévese, señora,
toda esa propaganda de la mentira
y déjeme violarla en privado. Prometo no existir.

Pero todas las circunstancias fueron climáticas
y los abdominales se me irán desdibujando.

X

Nada más
de momento,
gracias.

viernes, 17 de agosto de 2012

Si entras en mis ojos

Desde la última vez que escribí hemos maquetado seis canciones más, ya son nueve las que tenemos preparadas. Me cuesta escribir aquí sin desvelar los título que integrarán este nuevo disco, aún sin título, que estamos haciendo. La última que hemos grabado es Si entras en mis ojos. Es muy probable que esta sea la primera canción del disco. Es una canción que hice pensando en mi exmujer, después de tantos años le pedía que se quedara conmigo "en la canción". Luego descubrí que estaba hablando para todo el mundo, para las personas que han querido entrar en mi mundo, en mi forma de velo, para las que han querido entrar en mis ojos. También hablo en la canción de mi revolución mental, la que busco y quiero propiciar con estas canciones. 

A continuación os dejo un vídeo de esta canción tocada en el concierto que di en mi cumpleaños en Libertad 8, fue la primera. La grabó mi padre, que he hecho un canal en YouTube para subir un montón de vídeos que tiene muy interesantes de los últimos conciertos en Madrid y Salamanca.


También he encontrado hoy otro vídeo. Es de la noche vieja 2011-2012. La pasamos en el Cotton Club de Salamanca haciendo una jam session, la mejor forma de comenzar el año en el que deseaba grabar un disco nuevo. Se está cumpliendo. Espero terminar el año presentándolo, y pasar el 2013 viajando para presentarlo por ahí. Os pongo el vídeo.



Gracias a los que estáis leyendo estas palabras y compartiendo conmigo la ilusión de hacer un nuevo disco.

lunes, 6 de agosto de 2012

"Sentidos y sinsentidos de Andrés Sudón"

He encontrado en una vieja página web un texto que me ha gustado mucho releer. Lo escribió hace más de diez años mi querida Irma Correa. Ella estaba estudiando periodismo, y escribió este perfil como trabajo de clase. Se trataba de hacer el perfil de un artista, pero creo que fue más allá, aún me sorprende el profundo y cariñoso conocimiento que esta sensible e inteligente persona tiene acerca de mí.

He de decir que lo de "(...) lo que pretende no es comunicar, sino existir (...)", es cierto, aunque a día de hoy pretendo las dos cosas. Por lo demás me veo reflejado y, a veces, abrumado. Leerlo me ha transportado a esa época en la que estaba a punto de trasladarme a Madrid por primera vez, para vivir muchas aventuras y desventuras. Después de todo, no parezco muy diferente.

En estos días de verano, cuando cierto existencialismo me envuelve, me viene bien este reencuentro con mi yo del pasado. Pongo a continuación el texto:

Sentidos y sinsentidos de Andrés Sudón
por Irma Correa

Ojos

Los ojos de Andrés Sudón recuerdan a un cuadro multicolor y pluriforme, de esos que a primera vista aparecen sólo como un vestigio de lo que son, pero que concentrando todos tus sentidos en ellos terminan mostrándote nuevas formas y nuevas ideas. Una palmera. Una casa roja de dos plantas. Una ola. Un cocodrilo. Un tren. Lluvia.

Son unos ojos estáticos. Necesitan tiempo y pausas para ver lo que ven y canalizar lo que han visto. Se clavan y dejan clavados. Pero también rige en ellos la ley de la gravedad: escapan irremediablemente hacia el centro de la belleza.
 
Cuenta que cuando leyó "El Alquimista" de Paulo Coelho su vida retomó la consciencia de la abstracción. Hasta entonces, las cosas formaban parte de un todo circular. Primero las miraba, luego las veía, y por último las atrapaba para su colección personal. Sin embargo, siempre supo que todas y cada una de las esencias que guardaba tendrían un sentido específico. No guardaba por deleite, sino en condición de humano pensante. Por eso cuando leyó el libro supo por qué le gustan tanto la primavera, los gatos y las sonrisas.

Él no mira lo que todo el resto. Mirar está de más. Y está de más cuando se tiene gafas. Hay que ver. Esto lo supo con tres años, cuando le hicieron llevar gafas durante algunos meses sin tener falta de vista. Veía todo borroso y los primeros días se quejaba a su madre porque necesitaba ver la tele y dejar de tropezarse. Su madre le puso una goma a las gafas para que no pudiera quitárselas. Al final se acostumbró tanto a su difuminada realidad que no se acuerda de cuándo terminaron por quitarle las gafas, sino de todo el tiempo que vio a través de ellas. Sus ojos se adaptan pero nunca son sumisos.

Manos
.
Aunque lo habitual se verle tocar la guitarra, lo cierto es que sabe tocar varios instrumentos, entre ellos el violonchelo. Dice que es demasiado estático, que no le deja moverse. Quizá sea un sol sostenido, que le hace agarrotar las piernas para poder acariciarlo.

Pinta colores. A veces no sabe lo que está pintando. Otras veces pinta lo que sabe pero con formas que casi nadie entiende. Y la mayoría de las veces pinta lo que ve con sus oídos.
Le gusta escribir sobre este mundo y sobre muchos otros. su lenguaje es de una cotidianeidad asintática. Ha escrito poesía, cuentos, canciones y una novela. todos ellos son él. Es consciente de que los sujetos, los verbos y los predicados existen para enredar con ellos, no para sentirse sometido. Por eso cuando la gente lee lo que escribe no lo entiende. Precisamente porque lo que pretende no es comunicar, sino existir.
 
Su mano derecha tiene uñas largas. Con ellas rasga las cuerdas, desafía a la hamburguesa con queso y hace cosquillas a sus gatos Suiti y Luna. Todo esto hace que no pueda siquiera echar de menos jugar al baloncesto. Nadie necesita instantes de distracción para evadirse de una realidad poética.
 
Las venas de sus manos están visibles todo el tiempo. Son anchas y fuertes, pero no muy numerosas. Él dice que es de tanto tocar la guitarra. pero lo cierto es que hace tiempo decidieron alinearse para contraatacar a los focos sin nombre. Por si acaso.

Boca.

Aunque suene extraño tiene una boca con rayas. Porque no sólo tienen rayas sus labios, como todo el mundo, sino que cuando habla las palabras se van colocando en perfectos pentagramas, de tal manera que cuando habla, canta.
 
Suele decir que le cuesta cantar. Que le duele. Y no es que se quede ronco después de cada concierto, sino que su voz va coloreando el ambiente hasta que desaparecen los espacios en blanco. Es muy duro pintar con la voz.
 
Habla sin parar y le gusta que le escuchen. Dice cosas coherentes y otras que no lo son tanto, pero incluso estas penetran en las orejas del oyente como si fueran mantequilla. Recuerda un concurso de debate al que se presentó con su instituto hace años y en el que llegaron a la final. En las fases previas él y su grupo tenían perfectamente aprendidas las argumentaciones que habrían de dar en cada tema. por supuesto tanto a favor como en contra. Llegado el momento de su intervención en esta final, su cabeza y su boca dijeron "no" a lo que debía decir y no dijeron nada. Sólo silencio. Y aunque perdieron, disfrutó más de ese espumoso instante que de las palabras que no pronunció y que le hubiesen dado la victoria. Esas palabras no fueron pronunciadas porque nunca legaron a ser suyas.
 
Más de una de una vez le ha pasado que estando en un concierto el murmullo de la gente se convierte en un coro atonal. Entonces para. Se aleja del micrófono y sigue cantando. Pero si el desagradable ronroneo continúa vuelve al micrófono y canta para ellos, para los grillos. No sabe si le entienden o no, pero por lo menos les hace unirse a la melodía.
Alguien dijo una vez que el pensamiento es como un extraño río de luz que moja los rincones más cotidianos. Andrés moja sus días con pasos, cigarros y un cuaderno azul.

Nariz.

Andrés tiene una nariz especial. Despunta hacia el suelo y se anchea brevemente hacia los pómulos, más que nada para advertirles de que es ella la que se encarga de otear los imprevistos y los previstos. Sus pecas ennegrecen cuando algo no marcha del todo bien, y se vuelven naranjas cuando ha respirado hondo y lento.

Sobre su nariz descansan unas gafas de pasta azul. Antes que ellas, unas de color metal se movían inadvertidamente entre ojo y ojo. Las azules delimitan la frontera nariz-ojos. Son las gendarmes de su expresión facial. El único estado policial que Andrés permite en su cuerpo y en su vida.

Su nariz está acostumbrada a soltar la alarma cuando una persona desprende un hipócrito aliento de verdades. Entonces moquea, se arruga y se tensa. Sin embargo, el resto de su cara se relaja, mostrándose cordial y afectiva. No pasa nada, pero el olor perdurará hasta nuevo aviso en el cajón de los desconciertos"

Fotografía de José Antonio Morena que acompaña al texto en la página donde lo encontré

Sobrenatural

Hoy hemos tomado medidas y comenzado a vestir a la canción Sobrenatural. De nuevo ha sido gratificante la sesión de trabajo, el tiempo pasa volando jugando con Antonio de Pinto. La canción tiene una dinámica y unos arreglos claros. Va a quedar muy bonita. Esta es de las bonitas. Ya imagino el cello de Óscar Martín, la flauta de Álvaro Benito, la guitarra de Alberto Navales... El esqueleto ya anuncia la mágia que pretendemos.

Esta canción la compuse hace un par de veranos, cuando vi una foto de unas vacaciones de tres años antes. Una foto llena de belleza, pero que me creó cierta sensación de desasosiego. Aquí os dejo una versión con Alberto Navales a la guitarra y José Congosto en la percusión.



Quiero terminar diciendo que es probable que ya no desvele muchas más canciones, quiero dejar algo en secreto, como sorpresa. También quiero decir que voy a usar este blog para más cosas que para hablar de la grabación del disco. Hola.

miércoles, 1 de agosto de 2012

Amores indoloros

Hoy hemos tenido una nueva sesión de trabajo, seguimos haciendo demos para ver por dónde va a tirar la producción. No sabíamos muy bien qué íbamos a hacer ni cuánto podríamos progresar hoy, ya que no teníamos mucho tiempo. Sin embargo nos decidimos por Amores indoloros, una de las más importantes del disco, de hecho, si no fuera un poco cursi, casi podría llamarse así, pero esa es la esencia del álbum, la evolución personal hasta llegar a no apostar por el dolor en ningún caso, sino por la naturalidad y el placer (no el desfase, el placer, como el que da beber un baso de agua, por ejemplo).

Antonio de Pinto es una máquina, y la hemos dejado casi para publicarla. Le ha dado el estilo y la forma que yo soñaba sin saber imaginarlo. Es muy buena la comunicación entre nosotros, y muy similares nuestros gustos, de modo que no perdemos el tiempo discutendo qué hacemos o no. Parece que, de momento, lo vamos teniendo claro. 

La canción la hice cuando la soledad se marchó al regresar ella de su largo viaje. El tiempo que pasé conmigo me sirvió para entender que el amor ha de ser algo bueno, ya me basto yo solo para darme problemas y disgustos, para eso no necesito a nadie. Pero sí necesito a alguien para hacerme feliz y estimular mi existencia."Quiero estimulantes amores indoloros, / no llorar sobre el inodoro".

Os dejo una versión que hicieron Dani Fernán y Paula de Alba aquel día tan bonito que todos en el Micro Abierto Libertad 8 cantaron mis canciones.


lunes, 30 de julio de 2012

El desierto de espejos

Acabo de llegar de una nueva sesión de grabación, la segunda. Todavía no estamos grabando cosas definitivas, estamos en el proceso de hacer demos para ir viendo lo que queremos hacer, sobre todo con las canciones menos arregladas, las más nuevas, pues muchas de ellas ya tienen arreglos de violonchelo, guitarra eléctrica, flauta... El otro día hicimos una demo preciosa de Con naturalidad, hoy hemos comenzado a trabajar con El desierto de espejos.

El desierto de espejos es una canción muy especial, una canción medicinal. Alguien a quien quiero mucho empezó a encontrarse muy mal del alma, y yo me quedé paralizado, sin saber qué hacer. Se me ocurrió, ante mi impotencia, hacer una canción que dijera las cosas que creía que podrían ayudar a esta persona tan querida, para que se repitieran en su cabeza y las acabara convirtiendo en suyas.

El verano pasado me vi a mí mismo prestando mucha atención a la letra mientras la ensayaba una y otra vez. Siempre en verano una insistente nada me envuelve, y la canción me dio luz. De modo que la considero una canción curativa.

En la demo que hemos hecho hoy han aparecido cosas bonitas, un minutero, un corazón latiendo, un diccionario... Como haremos con todas, la dejaremos ahí medio vestida, para volver a ella más adelante, cuando tengamos una idea global más completa del disco.

Os dejo un vídeo de hace un par de años, la toqué en la sala Alquimista con Maite Cabero al acordeón.


sábado, 28 de julio de 2012

Con Naturalidad

Hoy ha sido veintiocho de Julio de dosmil doce. Por fin nos hemos juntado Antonio de Pinto y yo para comenzar a trabajar en el disco. Eso significa que aquí comienza una historia para vivir y contar. Hoy ha sido un memorable sábado, toda la tarde jugando con mi Amigo Antonio a hacer canciones. Decía Nietzsche algo así como que la madurez es tomarse la vida tan en serio como cuando jugábamos de niños. Lo vamos a pasar muy bien.

Antonio ha propuesto comenzar con la canción Con Naturalidad, lo cual es perfecto, ya que me parece la canción más significativa del álbum que sueño. Cuando, a primerísima hora, a las doce de la mañana, grabé la guitarra y la voz guía, el sueño comenzó a tomar forma. Antonio se puso manos a la obra, y en menos de medio día ha creado una demo más que decente, yo diría indecentemente decente. Estoy evidentemente emocionado por estar haciendo esto, trabajar con Antonio de Pinto, grabando mis canciones con un productor al que admiro y con el que tengo confianza y una larga amistad. Hemos comenzado muy bien. Con naturalidad.

Así, con naturalidad, comienzo también este relato en calidad de narrador y de primera persona del singular, probablemente en presente de indicativo. Están sucediendo cosas muy bonitas alrededor de esta grabación. Quiero contarlas aquí para no olvidarlas y para que las lea quien lo desee.Este blog está naciendo también, después crecerá y tomará forma.

Veamos qué sucede.

Aquí dejo un vídeo de cuando la acababa de componer: